Los productos de cáñamo son relativamente nuevos en el panorama italiano y en los últimos años se ha visto una verdadera «fiebre del oro verde» por parte de muchos empresarios. Desde inflorescencias hasta derivados (cápsulas, colorantes y cremas para la piel), hoy en día el cáñamo legal se usa de diferentes formas. En un mercado en fuerte ascenso, en el que cada día se consolidan nuevos competidores, para las marcas es fundamental diferenciarse de la competencia cuidando el envase de sus productos.
En este artículo veremos algunos ejemplos de envases en los que la combinación de diseño innovador y excelentes materiales permite captar la atención del consumidor y expresar con eficacia los valores de la marca.
La atención a la sostenibilidad
El primer ejemplo es el de ZoZ, empresa estadounidense productora de cannabis y productos derivados del cáñamo. Las inflorescencias de ZoZ se presentan en tarros de vidrio con el logotipo en relieve, envueltos en una cartulina negra opaca que protege el producto de la luz. Los materiales utilizados, cartón reciclable y tarro de vidrio reutilizable, son respetuosos con el medioambiente y la empresa está probando un sistema de vacío.
Leef, una empresa de suplementos y productos de belleza a base de CBD (cannabidiol), también ha elegido materiales ecológicos para su jabón, que viene en una funda de papel biodegradable y plantable. Una vez descartado el producto, el cliente puede enterrar la funda y hacer crecer plantas de tomate, aumentando el ciclo de vida del envase.
Algunas marcas en la industria de la cosmética y el bienestar han tratado de distanciarse de la imagen del cáñamo, tradicionalmente asociada con la cultura callejera,
y apuestan por envases sobrios y refinados con el fin de crear confianza en las propiedades de esta planta.
Es el caso de Kana Wonders, que para sus aceites a base de CBD utiliza envases caracterizados por diseños básicos y colores pastel. Cada tonalidad evoca el efecto que genera el producto: el rosa evoca la tranquilidad, el azul noche el sueño nocturno y el amarillo la concentración.
La marca de productos de bienestar Healist Naturals también ha apostado por la sobriedad con un envase de cartón blanco que recuerda al de los medicamentos y suplementos, combinado con un estuche interior de colores que muestra dibujos «botánicos».
Para su línea de artículos de belleza derivados del cáñamo, Mineral ha elegido estuches de aspecto elegante y minimalista de papel de cáñamo compostable, producido con las mismas plantas utilizadas para realizar sus productos. En este caso, el envase es capaz de crear una conexión entre el embalaje y el producto en sí y resaltar la versatilidad de este último.
En cambio, la empresa cosmética Lord Jones va en una dirección diferente, pues para sus estuches de cartón ha elegido estampados de lámina metálica y elementos en relieve que recuerdan la suntuosa estética de los antiguos escudos de armas reales.
Creado por el diseñador Marco Arroyo-Vázquez, Mind CBD es un proyecto de envasado para tiras sublinguales de CBD. El concepto propone un paquete de cartón del que emerge, como en un bajorrelieve, la imagen de un rostro humano de expresión tranquila para evocar el efecto beneficioso sobre la psique generado por el producto. Una caja que recuerda casi a una obra de arte.
La descripción general de los envases de los productos derivados del cáñamo termina aquí. Para obtener más información, lee este artículo: «¿Cuál es el envase adecuado para el cáñamo legal?»